La eficiencia energética y el desarrollo de las energías renovables son asunto de todos. Desde enero de 2019, tres centros de salud se han unido al proyecto Hospital Sudoe 4.0. La Clínica Belharra amparada por la CPI de Bayonne y el impulso de los referentes de la institución, como Ma-alen Gélizé, participa en el proyecto SUDOE 4.0. Así, busca mejorar las políticas de eficiencia energética en edificios públicos, ayudar a reducir la huella de carbono y maximizar el rendimiento energético mediante la práctica de la autoproducción de energía. 


Con el apoyo de ingenieros y especialistas en energía sostenible, la instalación comenzó su experimentación hace un año y medio. Durante 30 meses, se analizarán indicadores relativos a su consumo de energía, en relación con el clima exterior local, para permitirle, a largo plazo, aumentar significativamente su participación en la producción de autoenenergía.

Colaboración con Estia y Nobatek


«Con Maxime Courade, Asistente Ejecutivo de la clínica, trabajamos en estrecha colaboración con Estia, así como con ingenieros de NOBATEK/INEF4» explica Cédric Castaing, jefe de servicios técnicos de Belharra. Cada establecimiento tiene objetivos emblemáticos en torno a SUDOE 4.0. Para nuestra clínica, se trata de estudiar hasta qué punto podemos autoproducimos una gran parte de nuestra energía», apostilla.

El proyecto trabaja en la autoproducción de energía


DESPUÉS DEL EXPERIMENTO, LA FASE DE PRUEBA


En la actualidad, la clínica está en medio de un estudio diagnóstico. «Para lograr nuestro objetivo, primero tenemos que pasar por pasos observacionales», dice el gerente. La clínica está equipada con un sistema de gestión técnica centralizada en el que todos nuestros equipos están conectados. Esto facilita la recuperación de información sobre los medidores.

Al mismo tiempo, Nobatek trabaja en el trabajo de reingeniería de una clínica Belharra «virtual» para analizar a fondo el consumo energético general de los edificios. «Estos análisis también se adaptarán de un edificio a otro para determinar cuál es la mejor fuente de energía (eólica, solar…) para cada edificio de la clínica. 


El objetivo final es generalizar estas herramientas analíticas en otras instituciones del grupo para poder visualizar y gestionar más fácilmente el consumo de un hospital.

«Junto con este deseo de reducir nuestro impacto ambiental y crear nuestra propia energía, nos aseguramos de que las condiciones de trabajo y del paciente sigan siendo de alta calidad con un confort óptimo. Se están elaborando encuestas de satisfacción a lo largo de la fase de desarrollo del proyecto y también se ejecutarán después de eso», concluye Cédric Castaing.

Se espera que el proyecto SUDOE 4.0 esté operativo en marzo de 2022.